Vida
Nuestro Beato, nació en Caguas (Puerto Rico), el 22 de noviembre de 1918, hijo de Manuel Baudilio Rodríguez y Herminia Santiago, ambos de familias profundamente cristianas.
Tras el incendio de la casa familiar, en el cual el padre pierde el lugar de trabajo, se trasladan a la casa de los abuelos maternos, donde gracias a la cercanía de la abuela Alejandrina Esterás, y al ejemplo de sus padres, Carlos Manuel crece en la fe y la vida cristiana dentro de la propia familia.
Durante su niñez estudió en el colegio católico de Caguas. Hace la primera comunión y se integra al servicio del altar como monaguillo. Se gradúa de octavo grado en 1932, siendo el primer honor de su clase y obteniendo la medalla de religión.
Una tarde, cuando Carlos Manuel tiene 13 o 14 años, un perro salvaje de la casa del vecino logró entrar en el apartamento y atacó al sobrino del Beato que tenía tan solo un año de edad. Carlos Manuel luchó valientemente con el perro que había mordido en la nuca al sobrino. Este hecho marcó toda la vida de nuestro Beato. El origen del padecimiento intestinal de Carlos Manuel coincide con el ataque de este perro salvaje.
A consecuencia de la enfermedad tuvo que interrumpir los estudios de la enseñanza media que culminará finalmente en la Escuela Superior Gautier Benítez en 1939. Comienza a trabajar en el muelle de Humacao, siendo todavía estudiante de escuela superior, hasta que en 1939 obtiene el trabajo en el Departamento de agricultura federal en Caguas (1939-1942). Este trabajo le resulta fácil, por ser graduado con honores en el área comercial-secretarial; su expediente incluía cursos de dibujo mecánico, estenografía, matemática comercial, teneduría de libros, y otras materias. Su trabajo posterior en la oficina de Gurabo (1942-1946) se desenvuelve en la Comisaría del campamento O’Reilly. Se trata de un almacén o tienda que abastece de provisiones al personal militar y sus dependientes. (Tomado de la tesina de licenciatura de Yoni Palomino Bolívar, “Vivimos para esa noche”: Beato Carlos Manuel Rodríguez, Un apóstol contemporáneo de la liturgia.)
Oración para pedir la intercesión del Beato Carlos Manuel Rodríguez
Oh Dios, Padre de Bondad, que inspiraste al Beato Carlos Manuel una devoción ardiente al Misterio Pascual y, movido por la generosidad de tu gracia, lo llevaste a la celebración gozosa de los misterios celebrados en la Liturgia; colmaste, además, a tu siervo de celo apostólico y amor a los necesitados.
Concédenos, por su intercesión, que, celebrando con fe los santos misterios de la Muerte y Resurrección de tu Hijo, vivamos en la vida lo que celebramos en la Liturgia. Concédenos, también, la gracia especial que ahora te pedimos (pedir la gracia que se desea).
Por Jesucristo tu Hijo y Señor nuestro. Amén.
Tras el incendio de la casa familiar, en el cual el padre pierde el lugar de trabajo, se trasladan a la casa de los abuelos maternos, donde gracias a la cercanía de la abuela Alejandrina Esterás, y al ejemplo de sus padres, Carlos Manuel crece en la fe y la vida cristiana dentro de la propia familia.
Durante su niñez estudió en el colegio católico de Caguas. Hace la primera comunión y se integra al servicio del altar como monaguillo. Se gradúa de octavo grado en 1932, siendo el primer honor de su clase y obteniendo la medalla de religión.
Una tarde, cuando Carlos Manuel tiene 13 o 14 años, un perro salvaje de la casa del vecino logró entrar en el apartamento y atacó al sobrino del Beato que tenía tan solo un año de edad. Carlos Manuel luchó valientemente con el perro que había mordido en la nuca al sobrino. Este hecho marcó toda la vida de nuestro Beato. El origen del padecimiento intestinal de Carlos Manuel coincide con el ataque de este perro salvaje.
A consecuencia de la enfermedad tuvo que interrumpir los estudios de la enseñanza media que culminará finalmente en la Escuela Superior Gautier Benítez en 1939. Comienza a trabajar en el muelle de Humacao, siendo todavía estudiante de escuela superior, hasta que en 1939 obtiene el trabajo en el Departamento de agricultura federal en Caguas (1939-1942). Este trabajo le resulta fácil, por ser graduado con honores en el área comercial-secretarial; su expediente incluía cursos de dibujo mecánico, estenografía, matemática comercial, teneduría de libros, y otras materias. Su trabajo posterior en la oficina de Gurabo (1942-1946) se desenvuelve en la Comisaría del campamento O’Reilly. Se trata de un almacén o tienda que abastece de provisiones al personal militar y sus dependientes. (Tomado de la tesina de licenciatura de Yoni Palomino Bolívar, “Vivimos para esa noche”: Beato Carlos Manuel Rodríguez, Un apóstol contemporáneo de la liturgia.)
Oración para pedir la intercesión del Beato Carlos Manuel Rodríguez
Oh Dios, Padre de Bondad, que inspiraste al Beato Carlos Manuel una devoción ardiente al Misterio Pascual y, movido por la generosidad de tu gracia, lo llevaste a la celebración gozosa de los misterios celebrados en la Liturgia; colmaste, además, a tu siervo de celo apostólico y amor a los necesitados.
Concédenos, por su intercesión, que, celebrando con fe los santos misterios de la Muerte y Resurrección de tu Hijo, vivamos en la vida lo que celebramos en la Liturgia. Concédenos, también, la gracia especial que ahora te pedimos (pedir la gracia que se desea).
Por Jesucristo tu Hijo y Señor nuestro. Amén.